Las Labores de Lagartera, nuevo Bien de Interés Cultural Inmaterial
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha acordado, en su última reunión, declarar como Bien de Interés Cultural, con la categoría de Bien Inmaterial, las Labores de Lagartera: sus indumentarias y otras producciones textiles. Esta declaración, tal y como ha explicado hoy la consejera Portavoz, Esther Padilla, supone “el reconocimiento del valor patrimonial de una manifestación cultural singular, como es este conjunto de procesos textiles con siglos de tradición en nuestra Comunidad Autónoma y, en concreto, en la provincia de Toledo”.
Así lo ha expresado la consejera en rueda de prensa,
quien ha añadido, además, que esta iniciativa responde al compromiso del Ejecutivo
regional “de seguir protegiendo nuestra identidad cultural, algo que queda
demostrado, pues desde que gobierna Emiliano García-Page se han declarado 51
BIC, de los que 22 son con la categoría de Bien Inmaterial”.
La consejera ha detallado que las Labores y los
bordados de Lagartera han formado parte de la vida cotidiana del pueblo desde
hace siglos. Se han manifestado en su indumentaria, en piezas que formaban
parte de los ritos de paso como los bautizos, las bodas o los entierros. “Un
arraigo cultural que merece el mayor de los reconocimientos para que pueda
mantenerse vivo a través de generaciones implicadas en que así sea y para eso
tienen el apoyo del Gobierno de Castilla-La Mancha”, tal y como ha declarado
para apostar por “un bien que ha funcionado como elemento cohesionador de toda
la sociedad lagarterana tanto a nivel familiar como vecinal”.
Refuerzo de
vínculos y trasmisión generacional
Por tanto, la portavoz del Ejecutivo autonómico ha
justificado la aprobación de este BIC en la fuerza de dicho empeño vecinal que
“representa la seña de identidad de todo un pueblo y supone una dinamización
económica para el mismo, en la que las mujeres han tenido un papel
protagonista”.
Además, Padilla ha añadido que, con esta
declaración, “abrimos la puerta a medidas de protección que garanticen su
transmisión generacional y garantizamos el compromiso del presidente
García-Page de seguir protegiendo nuestra identidad cultural”.
De otro modo, la consejera ha apuntado que “sin duda
alguna, las labores de Lagartera, en todo su conjunto, deben formar parte de
este magnífico legado cultural inmaterial del que existe una selecta y
exclusiva muestra en nuestra región; sin olvidar la influencia económica que
este tipo de artesanía ha vinculado a la localidad toledana”.
La portavoz del Ejecutivo autonómico ha manifestado
que “la declaración como BIC tiene como objeto la protección jurídica y medidas
de salvaguarda del bien patrimonial”, a lo que ha añadido que “puede propiciar
la creación de Centros de Interpretación, el acceso a la convocatoria de líneas
de ayudas o el fomento de la educación al respecto de nuestro legado, como
puede ser su inclusión en los planes de estudio de centros escolares”, por
citar algunos ejemplos.
Patrimonio
Inmaterial por el uso de conocimientos y técnicas
El concepto Patrimonio Cultural Inmaterial abarca
los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas, junto con
los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son
inherentes, que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos,
reconocen como parte integrante de su patrimonio cultural.
Algunos ejemplos de otros Bienes Inmateriales
protegidos en Castilla-La Mancha son el Corpus Christi, la Seguidilla Manchega,
la cuchillería y navaja clásica, la Fiesta de los Gancheros del Alto Tajo, los
Episodios Caudetanos, así como los Danzantes y Mayordomos.
Características
e historia de las Labores de Lagartera
En el municipio toledano de Lagartera, para elaborar
estas indumentarias, utilizan agujas variadas e hilos de distintos colores y
materiales (lana o seda, por ejemplo), junto a determinadas modificaciones
sobre la trama y urdimbre del tejido (deshilados de distintos tipos); que
permiten llevar a cabo estas labores artesanales tan singulares.
Destaca la complejidad y la riqueza etnológica de
esta indumentaria, cargada de simbolismo y confeccionada artesanalmente, así
como las derivaciones socioeconómicas a que ha dado lugar su comercialización.
Por último, la portavoz del Ejecutivo autonómico ha
ofrecido apuntes históricos sobre estas labores. Ha expuesto que “es complicado
dar una fecha exacta del origen de las Labores de Lagartera, que seguramente
eran practicadas desde época medieval”. Además, ha detallado que, es a partir
del siglo XVI cuando existen puntuales referencias documentales. Entre ellas,
un documento que vincula a la Condesa de Orgaz, Juana de Toledo, con tres
mujeres lagarteranas, a las que acudió para que decoraran algunas prendas litúrgicas
con punto de espíritu; y, por otro lado, una mención en la obra del confesor de
los Reyes Católicos, Fray Fernando de Talavera, quien señala en el siglo XV las
ricas y excesivas decoraciones de las indumentarias en Lagartera, recogidas en
el tomo VII de la obra ‘Demasías en el vestir y en el comer’.
..
Comentarios
Publicar un comentario